Reseña libro: La chica que se llevaron, de Charlie Donlea

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Te guste o no este género, pienso que debes leer este libro y experimentar lo que es una narrativa de primera en lo que respecta a thrillers.

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Para empezar

Leímos La Chica que se Llevaron en nuestro Club de Lectura; de hecho, es la lectura de octubre y seguramente muy pocas han empezado a leerlo. Pero resulta que este es mi género favorito: thriller.

No fue el libro por el que voté, sin embargo, empecé a leerlo casi enseguida y wow… ¡No lo podía soltar! Lo leí en dos noches, la segunda noche lo terminé casi a las 03:00. Ese momento quise bajar a la cocina y tomar un trago, primera vez que me da esa sensación, pero la lectura estuvo intensa.

Sinopsis

Ella no recuerda nada. Mejor así. Su verdad era solo la mitad de la historia.

Megan McDonald está terminando el bachillerato, es popular, carismática, y tiene un futuro increíble por delante. Una de sus últimas noches en Emerson Bay la secuestran. Megan está dos semanas en cautiverio hasta que escapa, y pasa a ser conocida como “la chica que se llevaron”. Pero esa noche también desapareció Nicole Cutty y de ella nadie sabe nada.

Megan escribe un libro que se convierte en un bestseller, pero ella no está bien, recuerda muy poco de lo que ocurrió y necesita saberlo.

Livia, médica forense, es la hermana mayor de Nicole. Todavía se siente culpable por no haber contestado el teléfono cuando Nicole la llamó la noche en que desapareció.

Megan y Livia deciden investigar qué pasó con Nicole. Cuanto más profundizan se dan cuenta de que el verdadero terror reside en encontrar exactamente lo que estabas buscando.

Opinión personal

Te guste o no este género, pienso que debes leer este libro y experimentar lo que es una narrativa de primera en lo que respecta a thrillers.

La chica que se llevaron es relatado en tercera persona y se centra primero en Livia, médica forense y hermana de Nicole, la chica desaparecida. La primera parte del libro ahonda más sobre la línea laboral de Livia. Debo recalcar lo detallada que es la lectura en este aspecto. Me gustó mucho esa parte, sentí estar presente en las autopsias y me pareció genial la forma como el escritor llevó la investigación, desde un punto de vista forense, no policial, por medio de Livia.

Livia vive con el dolor de no poder encontrar a su hermana, además con la culpa de no haber contestado su llamada telefónica la noche de su desaparición. Desde ese día se ha mantenido alejada de sus padres y su ciudad natal, vive para su trabajo y entrena boxeo las noches; ambas cosas le ayudan a mantenerse centrada. Aunque todos los días, cuando llegan los cuerpos a su trabajo, tiene la sensación de que entre alguno de ellos podría está su hermana.

Megan, la chica que logró escapar del secuestro, no está bien, pero finge estarlo para que sus padres la dejen tranquila. Por ese motivo también escribió el libro, pero en realidad no logra recordar muchas cosas sobre esas dos semanas que pasó encerrada. Con ayuda de terapia e hipnosis, Megan busca la verdad. Este personaje está muy bien logrado y desarrollado, una realmente puede sentir su dolor y frustración. Su evolución a través de la lectura, es sobrecogedora.

La historia salta entre el pasado y el presente, pero el desarrollo de la misma se da en el presente; de hecho, esos saltos no dificultan en nada la lectura, es muy fácil de leer y totalmente comprensiva.

En los relatos sobre el pasado, conocemos a Nicole, la chica que sigue desaparecida, su personalidad, sus inquietudes. Es una adolescente conflictiva, pero logramos entenderla de alguna manera. De pequeña, un evento familiar le afectó mucho, pero nadie en su familia detectó eso y la persona que más quería, su hermana Livia, al ser una década mayor que ella, se alejó muy pronto de Nicole para ir a la universidad. Son de esas circunstancias de la vida que te marcan y si no recibes ayuda en su momento, se forma una bola de nieve que desencadena en cosas que luego no puedes controlar.

A momentos también entramos en la mente del secuestrador y esa parte es muy impactante, espeluznante. No leemos escenas explícitas de violencia, lo cual es muy bueno; pero leer su forma de pensar es muy perturbador.

Durante la lectura encontramos ciertos detalles por aquí y por allá, que nos dan una ligera sospecha de quién podría ser el secuestrador, eso me mantuvo con el corazón acelerado todo el tiempo y no podía soltar el libro, tenía que seguir hasta saber quién estaba detrás de todo.

El final se dio de tal forma que le dio un sabor real a la historia, un final dulce y amargo, como la vida en sí.

Para terminar

Este es un libro que se disfruta de principio a fin, que tienes que digerir paso a paso e ir con él buscando una ruta hacia la verdad. Fue un viaje muy intenso, así que de mil amores recomiendo esta lectura.

Apenas terminé este libro compré otro del mismo autor, ya les contaré cómo me fue.

Un abrazo,

MJ

Otras reseñas en mi Blog:

Almendra, de Won Pyung Sohn

El día que dejó de nevar en Alaska, de Alice Kellen

Gabriel(a), de Raúl Vallejo

El guardián invisible, de Dolores Redondo

Carthage, de Joyce Carol Oats

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