Dejar el azúcar y los carbohidratos, ¡qué difícil!

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Esta vez es diferente, tengo más de cuarenta años y sí que me ha dolido darme cuenta de que ya no puedo bajar de peso a la velocidad de antes…

Dejar el azúcar y los carbohidratos qué difícilTe cuento

Lo que te voy a confesar aquí es una experiencia personal. No es mi intención convencerte o asesorarte para que sigas algún tipo de régimen. Lo que quiero es contarte qué me pasó y qué me funcionó, pero cada persona es diferente y considero indispensable aprender a conocer tu propio cuerpo dese adentro. Una cita médica para chequear tu salud nunca está de más.

Asimismo, aún no sé si estos cambios serán permanentes en mi régimen alimenticio, veamos qué pasa.

Acompáñame a leer esta triste historia (léase con la voz de Silvia Pinal)

Nunca me ha importado ser gordita. Nunca he sido delgada, siempre he comido lo que he querido y nunca pasó por mi mente abandonar el placer de comer. Con los años he subido paulatinamente de peso, aunque de forma medio imperceptible. Unas cuatro veces en el transcurso de mi vida, me preocupó el sobrepeso, hice dietas y/o ejercicios que me ayudaron a volver al peso anterior, y luego seguía con mi vida.

Esta vez es diferente, tengo más de cuarenta años y sí que me ha dolido darme cuenta de que ya no puedo bajar de peso a la velocidad de antes; es más, he estado subiendo de manera incontrolable, sin haber aumentado las porciones diarias de comida, y es que mi metabolismo ya no es el mismo, esa es la triste realidad. Los trucos que usé en mis veintes y en mis treintas ya no me funcionaron, lo que fue un golpe muy fuerte para mí.

Mis vicios

No consumo alcohol, cigarrillos ni drogas, pero consumo algo igual de dañino: azúcar y carbohidratos. Me encantan los chocolates, ese es mi vicio más grande, también las galletas, los pasteles, siempre tengo que comer algo dulce. La gaseosa de la felicidad, la del oso polar y Santa Claus, para mí era una bebida deliciosa de la que jamás iba a prescindir porque me daba mucho placer, no me importaba si hacía daño o no. Mi filosofía era que la vida es corta y hay que disfrutarla, pero para mi cerebro ¿disfrutar era realmente comer todo eso?

Dejar el azúcar y los carbohidratos, ¡qué difícil!

Hace poco decidí bajar el consumo de dulces, dejé las gaseosas y las reemplacé por bebidas sin azúcar, estaba orgullosa de mí, hasta me sentí más ligera. Un mes después decidí pesarme con la idea de que seguro bajé unas pocas libras: había subido casi 10 libras. No sabes cuánto lloré, me insulté, sentí rabia y frustración. Nunca me había sentido tan mal conmigo misma.

Justo esa tarde me reuní con amigas y ellas me dieron mucho ánimo. Me ayudaron a aceptar que los cuarentas son diferentes, que debo quererme más y entender mi cuerpo. Que mientras esté sana, qué importa el peso. Me ayudó inmensamente hablar con ellas (no sé qué haría sin mis amigas). Con esa nueva perspectiva llegué esa noche a casa y cambié mi chip mental: de gordura a salud.

Cuando abres los ojos

Comencé a investigar, sabía que no debía abusar de azúcar y carbohidratos, pero nunca me detuve a estudiar qué pasa con el cuerpo cada vez que le metes esas cosas. Cuando te enteras cómo reaccionan tus hormonas, tus órganos, tu cerebro, ahí es cuando te das cuenta que te estás auto saboteando.

Ese susto era el que necesitaba para reaccionar. Empecé a relacionar mis continuos dolores de cabeza, mi hinchazón, mi caída del cabello y otros síntomas, con ciertos ingredientes que eran parte de mi vida diaria y que básicamente eran esos dos componentes.

Qué decidí hacer

Dejar el azúcar y los carbohidratos, ¡qué difícil!

Decidí hacer un cambio en mi vida: saqué el azúcar y los carbohidratos de mi consumo diario. No los dejé completamente porque considero que no es una solución viable, así que los como un día a la semana y también cuando me reúno con mis amigas una vez al mes.

Por supuesto que no es fácil, la primera semana fue la más dura porque te da una ansiedad brutal. Pero siempre que me da ganas de alguna de esas dos cosas, recuerdo lo que les hace a mis hormonas, a mi cerebro, a mi intestino y se me pasa. Además, estoy asustada, eso también ayuda. Otra cosa que me ayuda si las opciones anteriores no hacen efecto, es pensar que un chocolate (o lo que se me antoja ese momento) me espera el viernes.

Dejar el azúcar y los carbohidratos, ¡qué difícil!

Otra decisión que tomé, por cuestiones de salud, es el ayuno intermitente de 16 horas. En mi caso: mi última comida es a las 18H00 y al siguiente día, mi primera comida es a las 10H00. Si gustas puedes investigar los beneficios que tiene este proceso; a mí me ha funcionado muy bien hasta el momento. Me ha ayudado mucho el contenido de la Doctora Mindy Pelz, esta es su cuenta de IG.

Otro cambio importante que hice: si me da antojo de algo dulce, jamás lo consumo con el estómago vacío; el primer alimento siempre será algo salado y al final algo dulce. Esto lo aprendí de la Bioquímica Jessie Inchauspé, puedes ver sus videos en su página de IG o en su canal de YT.

Día asignado para azúcar y carbohidratos

Tengo un día a la semana asignado para comerlos, lo llamo “cheat day” y es el viernes. Usualmente lo que como ese día es mi chocolate favorito y algo de comida que contiene harinas como pizza, hamburguesa o cosas de picar, por ejemplo. Pero todo eso acompañado con agua. He dejado todas las bebidas, incluso las que llevan edulcorantes como stevia. Ahora solo bebo agua y ya estoy acostumbrada (no fue de la noche a la mañana, fue todo un proceso).

Dejar el azúcar y los carbohidratos, ¡qué difícil!

En reuniones sociales bebo agua o café (siempre negro sin azúcar) y en la comida suelo incluir alguna golosina, pero elijo bien las combinaciones y las como en un orden específico para no tener picos de glucosa muy altos; Jessie Inchauspé te explica bien sobre ese tema, es muy interesante.

¿Pero entonces qué como?

Mi enfoque son las recetas a base de proteína y también las recetas mediterráneas; estas últimas sí tienen carbohidratos y frutas, pero también tienen excelentes recetas con pescado, queso, frutos secos, vegetales y yogurt griego, así que saco buenas ideas de ahí.

Dejar el azúcar y los carbohidratos, ¡qué difícil!

Lo que sí les aseguro es que no me muero de hambre, como muy bien.

Qué he notado

Llevo un mes con estos nuevos hábitos. Para empezar, ya no está hinchado mi estómago, antes lo tenía duro como embarazada y ahora está mucho menos; ojo: el sábado en la mañana amanece ligeramente hinchado (después del “cheat day”), lo que demuestra lo que dicen los médicos especializados en el tema.

Por otro lado, mis dolores de cabeza han desaparecido, eso para mí fue increíble porque llegué al punto en que me dolía casi a diario. Mi piel se ve mejor, siento que tengo más energía y duermo muy bien (de 7 a 8 horas cada noche). Ahora le presto mucha atención a mi cuerpo internamente.

Me siento mejor de ánimo y más liviana; me peso una vez a la semana para chequear mi progreso y estoy bajando en promedio 1 kilo a la semana (puede que este ritmo baje en el futuro). Para algunos esto debe ser muy poco; para mí es una maravilla, no quiero ser flaca ni tengo el apuro de bajar 50 libras en 15 días, pero sí quiero estar sana. Bajar de peso es un bonus.

Qué me falta por hacer

Por un lado, quiero ir al médico y hacerme un chequeo general, eso está pendiente y es muy importante. Por otro lado, tengo que hacer actividad física; por lo que he leído, a mi edad conviene hacer actividades de fuerza como pesas. Aún no logro esa disciplina, pero espero hacerlo pronto.

Dejar el azúcar y los carbohidratos, ¡qué difícil!

Para terminar

Quise contarte mi experiencia porque la mayoría de nosotras, en algún momento, hemos sufrido con nuestro peso y muchas veces no entendemos qué está pasando. Sin embargo, nuestro cuerpo a nivel hormonal pasa por muchos procesos locos y es importante aprender a reconocerlos.

Nunca he estado de acuerdo en dejar de comer lo que a uno le gusta, pero cuando lo ves desde la perspectiva de tu salud a nivel organismo y a nivel psicológico, te das cuenta que puedes encontrar un equilibrio y que te vas a sentir mejor.

Espero que esta experiencia te haya ayudado de alguna forma y si te animas, me encantaría leer tu experiencia y saber qué te ha funcionado para sentirte bien.

Un abrazo,

MJ

Temas que te sugiero investigar (hay mucho contenido disponible tanto en español como en inglés):

  • Ayuno intermitente
  • Picos de glucosa
  • Cómo el cuerpo procesa el azúcar y los carbohidratos
  • El metabolismo de acuerdo a la edad

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Otros posts en mi Blog:

Una terapia llamada escribir | ¿Qué es la belleza realmente? | 6 formas de recargar energía todos los días

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