El día que dejó de nevar en Alaska, de Alice Kellen, reseña

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Me gustó mucho esa onda de expectativa en la historia de los personajes de este libro. El final es inesperado y me gustó.

El día que dejó de nevar en Alaska, Alice Kellen ReseñaPara empezar

Este es el primer libro que leo de Alice Kellen.

Lo leímos en nuestro Club de Lectura. Este mes teníamos ganas de leer algo romántico y este fue el elegido. Desde ahora te digo que es una historia de amor cliché, pero vale la pena leerla porque transmite muchas emociones y tiene giros que me sorprendieron y gustaron mucho.

Sinopsis

Un chico con el corazón de hielo. Una chica que huye de sí misma. Dos destinos que se cruzan. Heather cree que solo hay tres cosas que sabe hacer: atraer problemas, salir huyendo y correr. Así es como termina en Alaska, en un pequeño pueblo perdido, trabajando de camarera mientras intenta llevar una vida nueva y tranquila. Su único problema es que uno de los dueños del restaurante parece odiarla y que ella nunca antes ha conocido a nadie que despierte tanto su curiosidad. Nilak es reservado, frío y distante, pero Heather puede ver a través de todas las capas tras las que se esconde y sabe que en ocasiones hay recuerdos que pesan demasiado; como los de sus propios errores, esos que intenta dejar atrás. Pero, a veces, la vida te da una segunda oportunidad. La nieve empieza a derretirse. Y todo encaja.

Opinión personal

Este libro me atrapó desde el inicio. No solo es una historia de amor, sino también de superación personal. El libro tiene buen ritmo, es ligero y te mantiene enganchada/o de principio a fin, lo disfruté mucho.

Heather me cayó bien desde un inicio, cometió muchos errores y necesitaba huir de todo, empezar de nuevo; así que decide mudarse con sus ahorros a un pueblo remoto en Alaska. Si bien es cierto que huir no siempre es la solución y no era la primera vez que lo hacía, se requiere cierto nivel de valentía y fuerza voluntad para dar un paso así, cosa que muchos no tienen. Son esos cambios radicales los que generalmente nos hacen reaccionar y cambiar para bien.

Nilak por otro lado, es un hombre muy callado y misterioso, de él no se conoce mucho hasta la última parte del libro, pero eso no me pareció mal, lo poco que sabíamos de él, fue suficiente para darnos cuenta que es un buen tipo y que también huía de algo y necesitaba ese tiempo de aislamiento. La llegada de Heather rompió esa cápsula en la que Nilak se encerró y no quería salir.

También me cayeron muy bien los personajes secundarios, que básicamente son los habitantes de Inovik Lake, todos son muy buenas personas y acogieron a Heather desinteresadamente. Le dieron el cariño y la ayuda que necesitaba para seguir. El más importante es John, quien es la primera persona que conoce en aquel lugar, un hombre muy cerrado y serio, pero la relación entre ambos se desarrolla de una forma hermosa, tienes que leerlo.

Otro personaje, no menos importante y que adoré, es Caos, un perro rebelde que apenas conoce a Heather se pega a ella y se genera una amistad única entre ambos a partir de ahí.

Durante la lectura, también leemos fragmentos del diario de otro personaje llamado Annie, no sabemos nada de este personaje, pero vamos conociendo algo sobre ella poco a poco. En la última parte descubrimos todos los misterios que encierra su historia.

Me gustó mucho esa onda de expectativa en la historia de los personajes de este libro. El final es inesperado y me gustó.

Disfruté mucho conocer un poco de Alaska a través de esta lectura. Su autora supo transportarnos a ese maravilloso lugar, sentir el clima frío, saborear los platillos del restaurante de Nilak y Seth, imaginar sus bellos paisajes y sentir la calidez de la gente.

Por último, hay un personaje al que nunca llegamos a ver en escena, por así decirlo, pero es muy importante en la trama. Se trata de la mejor amiga de Heather. Solo puedo decirte que es el claro ejemplo de una persona tóxica y me llegó mucho esa parte, porque alguna vez yo tuve una amiga así y fue HORRIBLE. Logré salir de esa amistad, pero por circunstancias ajenas a ambas. O sea, no sé qué habría pasado si no la alejaban de mi entorno.

Ese tipo de gente existe y es terrorífico. Me gustó que la autora haya creado este personaje, porque talvez ayude a otras personas a identificar este tipo de relaciones tóxicas. Además, a pesar de que esta persona no estuvo presente durante el tiempo en el que se desarrolla la historia (en Alaska), su presencia se sintió fuerte durante la lectura. Eso estuvo muy bien logrado.

Así que yo de mil amores recomiendo este libro, ¡lo vas a disfrutar!

Si ya lo leíste, me encantaría saber tu opinión.

Un abrazo,

MJ

Otras reseñas en mi Blog:

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